Un símbolo del poder veneciano
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Un sombrero inusual en forma de cuerno es uno de los elementos en la vestimenta tradicional de los gobernantes de la República de Venecia. Al igual que la corona de los monarcas, este gorro con forma extraña se consideraba un símbolo del poder. El artículo estaba hecho de un brocado de lujo, decorado con oro y piedras preciosas.
Acabado dorado
El gorro veneciano se llama «Zoia», que en la traducción del dialecto véneto significa «piedra preciosa». La forma y los patrones del sombrero fueron cambiando ligeramente con el paso del tiempo, pero el metal noble siempre desempeñó el papel clave: la tela de oro de capas múltiples era el orgullo de los artesanos venecianos y era famosa en todo el país.
A lo largo de los siglos de historia de Venecia, se presentaron muchas variaciones del preciado «cuerno»: terciopelo carmesí con anillos de metal amarillo; brocado, enmarcando una enorme cruz dorada. La costura con hilo de oro, diamantes y perlas no solo aumentaba el costo del tocado, sino que hacía hincapié en la posición regia del portador.
En la foto: los jefes de la República de Venecia, vestidos con sombreros precisos.
Aspecto histórico
Las primeras menciones del tocado aparecen en las fuentes históricas del siglo XII, pero la tradición de su uso apareció incluso antes. Un gobernante se ponía el «cuerno» adornado con el metal de los reyes sólo para las ceremonias solemnes, mientras que en los días ordinarios llevaba su versión menos costosa hecha de terciopelo rojo y bordada con hilo de oro.
Se creía que este hábil tocado le daba fuerza y coraje a su dueño, además de simbolizar la beligerancia, la libertad del espíritu y la conexión con Dios. La versión dorada del «cuerno» enfatizó tales características de la mejor manera posible.
En la foto: el tocado de los gobernantes venecianos, hecho de tela dorada.
Nuestros días
En la actualidad, el auténtico «cuerno» de oro puede verse en el Museo Correr de Venecia. Además del preciado tocado, se exponen un retrato y un busto del famoso gobernante veneciano Francesco Morosini, vestido con un sombrero hecho de tela de oro.
Este famoso tocado no se olvida en la Venecia moderna. Los lugareños lucen con gusto una réplica del sombrero durante el carnaval anual de Venecia. El traje festivo del gobernante es muy popular, cuyo elemento principal es una réplica del preciado gorro.
El oro ha inspirado a los joyeros de la corte durante siglos. Gracias a sus atrevidos experimentos y la durabilidad del metal amarillo, hoy tenemos la oportunidad de admirar las piezas históricas.
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