El elixir de la longevidad
Desde la antigüedad la gente creía que el oro tenía propiedades curativas. El metal eterno simboliza no sólo la riqueza y la prosperidad, sino la longevidad. A lo largo de muchos siglos la gente practica el tratamiento con oro. Las primeras menciones de su aplicación médica se refieren al año 2500 antes Cristo.
El metal precioso para el tratamiento de los seres humanos lo empezaron a usar en la India y China. Los antiguos médicos fabricaban las soluciones auríferas para el rejuvenecimiento del organismo y la restauración. Los chinos las llamaban ‘’elixir de la vida’’ que amplía la juventud y la belleza.
El fármaco más importante de la antigüedad
En la edad media, los médicos árabes y alquimistas crearon el “elixir de la longevidad”: una panacea mágica contra todas las enfermedades a base de oro. El misterio de fabricación del medicamento curativo lo mantenían en secreto durante varios siglos. A finales del siglo XVI éste fue revelado por David de Planis Campy, el médico de la corte del rey de Francia Enrique III. En 1583 el galeno publicó su libro ‘’El tratado sobre una medicina grande e inesperada de la antigüedad, sobre el oro potable, un remedio milagroso y universal contra todas las enfermedades”.
El famoso médico y alquimista suizo del siglo XVI Paracelso introdujo el término Aurum potabile ‘’oro potable’’. Así llamaba las ingestiones, aplicadas adentro, que contienen partículas del metal precioso. El científico decía que ¨el objetivo de la alquimia debe ser la fabricación de las medicinas y no la transformación de los metales innobles en oro¨.
La auroterapia es un método de tratamiento con medicamentos que contienen oro.
Pruebas sólidas
Paracelso creía que usando elixires de oro se puede fortalecer la salud, combatir la depresión, las enfermedades de las articulaciones y la columna vertebral. Muchos médicos medievales y reyes compartían este punto de vista.
En los manuscritos antiguos se describe un caso, cuando el médico personal del rey francés Louis XI le prescribió ‘’beber oro’’ regularmente contra los ataques de migraña y gota. Una cuenta de 96 táleros de plata, con los que se compró el "elixir de oro" para el rey, ha llegado hasta nuestros días y sirve de prueba documental.
Usar adentro las soluciones de “oro potable’’ llegó a ser muy popular entre los representantes de la nobleza y la aristocracia. A lo largo de varios siglos ellos tomaban los medicamentos de oro con la esperanza de obtener la longevidad y la juventud eterna.
En una de las revistas médicas británicas contemporáneas se publicaron los datos de un análisis de los restos de Diana Poitiers, la famosa dama noble de la primera mitad del siglo XVI, la amada del rey de Francia Enrique II. En su cabello los expertos encontraron el contenido elevado de oro. La favorita del monarca no era reina y nunca llevaba la corona, por eso el informe de la prueba pericial, lo explican los científicos por el uso frecuente de “oro potable’’.
Tratamiento con oro
Para preparar el “elixir de oro”, los alquimistas usaban una receta sencilla: una pequeña cantidad de oro, la colocaban en la vajilla cerámica con agua. Luego el líquido lo hacían hervir, mientras no se evapore a la mitad. Se tomaba una cucharadita de agua dorada tres veces al día.
A principios del siglo XX, los médicos empezaron a aplicar más seguido medicamentos con partículas de oro. El doctor bacteriólogo alemán Robert Koch en 1890 demostró el efecto positivo de oro en la lucha contra los bacilos de tuberculosis. En 1930 las soluciones auríferas en forma de inyecciones las empezaron a usar para el tratamiento de los pacientes con artritis reumatoide. En el transcurso de los ensayos clínicos, realizados a lo largo de varias décadas, este tratamiento ha sido reconocido como efectivo.
El agua dorada es un remedio popular en la medicina ayurvédica. Los curadores tradicionales lo usan como un fuerte inmunoestimulante.
En la medicina actual hay una serie de medicamentos que contienen nanopartículas de oro. Tales medicinas las usan para combatir infecciones crónicas, ya que el metal precioso posee un alto efecto bactericida. Además, las soluciones auríferas las usan en radioterapia en el tratamiento del cáncer.
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El oro para la juventud y la belleza
